viernes, 30 de diciembre de 2016

Crash Boom Bang!


Todo el mundo conoce el juego "Crash Bash", un party game para la PSX (o PSOne) con los personajes de la saga Crash Bandicoot como protagonistas de varios minijuegos que salió en el año 2000. No hace falta ser muy listo para entender que la inspiración para dicho juego fue el icónico "Mario Party" que había salido para Nintendo 64 un par de años antes. El juego tenía su punto, y si habías sido de los que habían crecido con la trilogía de Crash Bandicoot para PSX, ese juego te iba a gustar. El cariño era más fuerte que la calidad del juego, y no era tan malo, pero simplemente quedó por debajo de las expectativas cuando se dieron cuenta que era prácticamente imposible superar a "Mario Party".

Pero hoy hablaré de Crash Boom Bang! (lo llamaremos CBB!). CBB! es el segundo juego party game de la saga Crash y hasta el momento el último. La mecánica es sencilla: eliges un personaje de los 17 que hay, lanzas un dado y corres por un tablero de números y mini-juegos hasta que tu o alguno de tus contrincantes cae en una casilla especial. Al caer en esta, se iniciará un mini-juego (hay hasta cuarenta distintos), tal cual se hace en "Mario Party". Es normal que la gente compare ambos juegos, es básicamente el mismo sistema, y a pesar de que le tengo mucho cariño a Crash, Dimps no supo hacer un buen trabajo con este. Lo hicieron bien con Sonic en GBA, pero al pasarse a la DS esto fue lo que salió.

Jugando al billar.

La historia es la siguiente (sacada del manual):

"Estimada Srta. Coco, 
¡Está invitada a la carrera mundial Cannonball!  
¡¡El ganador recibirá 100.000.000$!! 
¡Se admite cualquier medio de locomoción! 
El Vizconde" 

Los Bandicoot han recibido la invitación de un tal El Vizconde que los invita a una carrera mundial llamada Cannonball. El pretexto de El Vizconde es que los concursantes resuelvan los rompecabezas y encuentren la piedra de poder que este está buscando desde que encontró un mapa antiguo en la construcción de su complejo turístico en la Isla de Tasmania. El Vizconde necesita las mentes más brillantes y las personas más hábiles para que compitan entre ellas y le faciliten el trabajo, eso sí, con el engaño de que dará 100.000.000$ al ganador. El que consiga más puntos es el ganador de la fase. Si cumples los objetivos que te asigne El Vizconde, aumentarás notablemente tus posibilidades de ganar la fase. Cada personaje tiene una intención diferente respecto al premio —y como no podía ser de otra manera— Cortex y sus esbirros también estarán presentes. No tenemos que olvidar que el Dr. Neo Cortex siempre ha ido tras las piedras de poder y los cristales para conseguir dominar el mundo.

En total existen 6 mapas, cada uno con sus fases, y a su vez, con mapas secundarios. Las frutas Wumpa sirven como puntos (o monedas si queréis seguir comparándolo con "Mario Party") y en función de estas sabrás si has ganado o perdido la fase. Ganar o perder frutas Wumpa depende de la casilla en la que caigas tu y tus contrincantes; existen 6 cuadrados distintos:

 - Cuadrado de objeto: Si caes en este cuadrado, consigues un objeto.
 - Cuadrado negativo: Si caes en este cuadrado, pierdes puntos.
 - Cuadrado de Battle Royale: Todos los jugadores luchan entre sí en un mini-juego.
 - Cuadrado positivo: Si caes en este cuadrado, consigues puntos.
 - Cuadrado de objeto clave, cuadrado en blanco: Parece un cuadrado normal, pero el primero que se pare en él podría conseguir un objeto clave.
 - Cuadrado de batalla: Entre 1 y 4 jugadores luchan entre ellos en un mini-juego. Se elige automáticamente un adversario para el jugador que cae en este cuadrado.

Uno de los mapa-tableros y la pantalla de selección de personaje. Este es el segundo juego donde aparece Tawna, la ex-novia de Crash.

Los mini-juegos no son nada del otro mundo. Hay algunos más divertidos que otros pero en general el juego deja mucho que desear, y es una pena porque Crash tuvo su momento dorado que poco a poco fue decayendo cuando compañías distintas a las de Naughty Dog quisieron hacerlo brillar de nuevo. Además, los gráficos y la calidad de CBB! en general son bastante engañosos, pueden parecer buenos porque tiene una portada atractiva, pero esos ojitos brillantes y verdes de Crash solo están pidiendo ayuda. La variedad de mini-juegos puede que sea lo más acertado. Se pisan casi todos los campos posibles y algunos son verdaderamente entretenidos, pero la emoción del momento se pierde con el dichoso tablero, los eternos y largos turnos de espera donde los contrincantes tiran el dado y lo peor, si juegas solo, sabes que vas a ganar seguro. Un party game se caracteriza para reunir a unos amigos y competir entre ellos, no es ni la mitad de divertido competir solo contra la máquina, y a pesar de que pueden jugar hasta 4 personas —e incluso existe una sala de chat— Crash Boom Bang! se quedó solo en una buena idea mal desarrollada.

Tierra, mar y aire. Los desafíos son coloridos e ingeniosos, algunos destacan por ser de equilibrio, otros por ser de precisión, y otros simplemente destacan en machacar botones y/o darles en el momento justo; desgraciadamente los mini-juegos solo duran pocos segundos (algunos no llegan ni a medio minuto) por lo que regresar tan rápido al tablero de juego es lo que realmente hace que CBB! sea algo desesperante.

Tennis, canoas, coches, carreras de caballos, carrera de obstáculos, fútbol, pinball, partidas de cartas, pesca, batallas de demoliciones, inflar globos, golf, concursos de hacer pizzas, carreras dentro de un barco que se hunde, tirachinas, puzzles, etc. La variedad está servida, pero no de la mejor manera. Ya para terminar, decir que existen 2 modos de juego: Modo Aventura y Modo Festival, aunque podrían perfectamente llamarse Modo Historia y Modo Mini-Juegos. Los otros modos que hay son varios recopilatorios de mini-juegos, galería de objetos conseguidos, "comercialización" de objetos entre los compañeros que tengas conectados gracias al modo inalámbrico y poco más.

 
No distingo si esto es tennis o es golpear piedras con una maza extraña. Por otro lado, carrera de canoas.

Consejos de Aku Aku que se repiten, esperas incansables, gráficos pobres, jugabilidad mala y que escasea debido a los largos ratos de pausa, historia sin trasfondo, final extraño,... Da la sensación de que Crash Boom Bang! fue hecho con muchas prisas, como si simplemente buscaran ensanchar el catálogo de DS con un juego chorra más. Sin sentimientos. Si buscamos un adjetivo negativo suave para el juego, podemos decir que es una estafa, algo muy triste. No hay más.
Le tengo mucho cariño a la saga, muchísimo —es mi saga favorita de videojuegos, más que TLOZ y eso es mucho decir— así que mis últimas palabras respecto a CBB! son: esto no se hace. Lloraré.

Como últimas curiosidades, decir que Crash es el único que tiene dos modelos distintos, uno para el mercado occidental y el otro para el mercado japonés; aún así, ambos mantienen el aspecto de origami como hacen los demás personajes; y por otro lado, Fake Crash hace su aparición en el juego como personaje jugable, algo que realmente me gustó.